Yo soy Libertad.
Pero no la gran diosa Libertad, esa que todos conocen y que permanece secuestrada y torturada continuamente, por gobiernos y religiones.
No, esa Libertad sigue luchando por sobrevivir a la prensa amarilla, a las armas de los que le utilizan como excusa, a la cadena perpetua a la que está sometida en pro de una "estabilidad" social... o vete a saber...
No, yo soy la otra Libertad, la de calle, la que te acompaña e intenta seducirte con susurros...
Soy esa Libertad deseada por hombres y mujeres, vestida de secretos y escondida cual amante prohibida.
Soy esa Libertad que debe permanecer silenciosa, pues, como las sirenas de las fábulas marineras, puedo hacer caer en desgracia a quien me escuche.
Soy esa Libertad que todo el mundo ansía, pero a la vez teme.
Esa Libertad aclamada y piropeada públicamente, y públicamente rechazada con desprecio.
Esa Libertad que, empujada a un segundo plano por mi hermana Responsabilidad, busco constantemente la aprobación de los que se atreven a coquetear conmigo.
Esa Libertad que con un guiño por tu parte, puedo llevarte a lo más alto, y descubrirte un mundo totalmente nuevo e increíble.
Si decides estar conmigo, te enamorarás, sentirás y vivirás, como quieras.
Pero serás criticado, odiado, lapidado y abandonado por la gran mayoría de quienes te rodean.
Y no, no me vale la frase típica de "No me importa lo que digan de mí", porque te encontrarás con la soledad de aquellos que tanto quieres, y que tan poco me comprenden o tanto me temen...
No te presiono, me conformo con que vengas a verme de vez en cuando.
Que dediques un momento de tu tiempo a soñar conmigo, y que alguna vez, así, sin que nadie lo sepa, te atrevas a salir conmigo aunque sea bajo una chapa, acompañado de mucha gente, o en lugares en los que sólo mis otros amigos y amigas puedan hacerte sentir cómodo.
Mientras tanto, te seré fiel, estaré a tu lado siempre que quieras vivir a tu modo y luchar por lo que realmente quieras.
Pero no la gran diosa Libertad, esa que todos conocen y que permanece secuestrada y torturada continuamente, por gobiernos y religiones.
No, esa Libertad sigue luchando por sobrevivir a la prensa amarilla, a las armas de los que le utilizan como excusa, a la cadena perpetua a la que está sometida en pro de una "estabilidad" social... o vete a saber...
No, yo soy la otra Libertad, la de calle, la que te acompaña e intenta seducirte con susurros...
Soy esa Libertad deseada por hombres y mujeres, vestida de secretos y escondida cual amante prohibida.
Soy esa Libertad que debe permanecer silenciosa, pues, como las sirenas de las fábulas marineras, puedo hacer caer en desgracia a quien me escuche.
Soy esa Libertad que todo el mundo ansía, pero a la vez teme.
Esa Libertad aclamada y piropeada públicamente, y públicamente rechazada con desprecio.
Esa Libertad que, empujada a un segundo plano por mi hermana Responsabilidad, busco constantemente la aprobación de los que se atreven a coquetear conmigo.
Esa Libertad que con un guiño por tu parte, puedo llevarte a lo más alto, y descubrirte un mundo totalmente nuevo e increíble.
Si decides estar conmigo, te enamorarás, sentirás y vivirás, como quieras.
Pero serás criticado, odiado, lapidado y abandonado por la gran mayoría de quienes te rodean.
Y no, no me vale la frase típica de "No me importa lo que digan de mí", porque te encontrarás con la soledad de aquellos que tanto quieres, y que tan poco me comprenden o tanto me temen...
No te presiono, me conformo con que vengas a verme de vez en cuando.
Que dediques un momento de tu tiempo a soñar conmigo, y que alguna vez, así, sin que nadie lo sepa, te atrevas a salir conmigo aunque sea bajo una chapa, acompañado de mucha gente, o en lugares en los que sólo mis otros amigos y amigas puedan hacerte sentir cómodo.
Mientras tanto, te seré fiel, estaré a tu lado siempre que quieras vivir a tu modo y luchar por lo que realmente quieras.
Comentarios
Publicar un comentario
Siempre se agradece un comentario, siéntete libre de opinar :)